Los inconfidentes deportados a Mozambique (1792-1812)

Los inconfidentes deportados a Mozambique (1792-1812)
El primer caso detectado sobre presencia de pensamiento latinoamericano en África, y sobre el que se conoce muy poca documentación, es el de los inconfidentes mineiros (de Minas Gerais, en Brasil) deportados en razón del movimiento que protagonizaron a fines del siglo XVIII. La Inconfidencia Mineira ocurrió en 1789, siendo deportados a Mozambique en 1792 Tomás Antonio Gonzaga, José Aires Gomes, Vicente Vieira da Mota, Joao da Costa Rodríguez y Vitoriano Goncalves Veloso, con penas de 8 y 10 años en distintos lugares de esa región africana. Hubo luego otras inconfidencias como la Carioca (1794) la Baiana (1798) y la Pernambucana (1801). También éstas generaron deportaciones a las posesiones portuguesas de África. (Véase Rocha p. 210-211) Las inconfidencias fueron movimientos de protesta que se han interpretado como antecedentes de la independencia del Brasil. En el caso de Minas Gerais, el primero de estos movimientos, quienes participaron fueron caracterizados como “el grupo más claramente definido en materia de producción literaria”, ha señalado el historiador paulista Carlos Guilherme Mota. Éste ha detectado en el movimiento tres ideas básicas: lo que llama las ideas de “integración” y que detecta en peticiones como que los “oficios se debían dar a los hijos de estas Minas”; las ideas “nacionalistas” como cuando se postula que los “oficios” sean para los “nacionales” y no para los europeos; y las ideas “radicales o revolucionarias” como las de quienes esperaban el “tiempo en que los hijos del reino han de ser nuestros cautivos”, donde se daría la inversión del proceso de colonización (Mota, p.31).
Destaca Mota igualmente que en Minas en 1789 se pensaba que era posible el apoyo externo por parte de Estados Unidos, Francia o Inglaterra, en caso que hubiera una revolución, y que se hablaba también de la eclosión de un movimiento revolucionario paralelo en la India, lo que mostraría además de las ideas antes apuntadas, la aparición de cierta conciencia colonial (Mota, p.35). Sabemos que algunos de los inconfidentes deportados como Tomas Antonio Gonzaga o José Resende Costa permanecieron mucho tiempo en África. Gonzaga casó con la hija de un negrero y murió en Mozambique en 1812, 20 años después de su llegada y Resende Costa fue elegido diputado por Cabo Verde. Sabemos igualmente que varios de los movimientos en pro de la independencia de las colonias africana de Portugal fueron interpretados como consecuencia de las ideas de los inconfidentes deportados (Rocha, p.211).
No sabemos, sin embargo, cuan difundidas fueron efectivamente las ideas de los inconfidentes brasileños, ni tampoco si influyeron sobre los africanos y si estos realizaron o no algunas reelaboraciones. Las afirmaciones de los informantes portugueses no bastan para probar tales asertos.
http://web.usach.cl/revistaidea/html/revista%202/html/pdf/devesfinal.pdf